Diario de una Feria (Martes)

Ayer martes empezamos el día más pronto. A eso de las 4 de la tarde empezamos a engrasar la maquinaria (horarios, asistentes...) para quedar sobre las 20,30 en el abrevadero de los caballos. Tras una vuelta de rigor para hacer un poco de tiempo, nos dirigimos a la casetilla de información para recoger a los que faltaban (¿o los que faltábamos somos notoros?). Después de hacer una visita express a la prima Cristina (algo borracha que andaba) nos fuimos a cenar a la caseta de Sergio tras el "¿comer de pie?, qué triste" de cierta persona cuyo nombre no quiero recordar en la caseta de Robe. Calamares fritos, montaditos de lomo, adobitos (uno que yo me sé hasta se comió el ajo del hambre que tenía xDD) y sobre todo rebujiro, para hacer bien la digestión :p
Después de la cena, tiramos para la calle del infierno (vaya nombre feo se ve escrito. la "callelinfienno" pa laura el año pasado). Allí el grupo se separó, unos tiraron de nuevo pa las casetas y otros nos quedamos con los cacharritos para vivir un acontecimiento histórico. La incertidumbre de los primeros momentos y la espera de la negativa por parte de elena (que no se dio) hizo que me tuviera que montar en el "ratón vacilón con gato comilón", es decir, y como dice Robe, te montas para que un gato te coma y luego te cague xDD
Eso de parecer que la cabina donde te montas va a descarrilar y vas a llegar volando más allá de 200 metros, y que eso gire dando vueltas sobre sí mismo.. no sé, parecía que no pero tiene su gracia y al final (mu al final) me terminó hasta gustando.
En fin, que la noche acabó sobre las 2 de la mañana, eso sí, esta vez sin prácticamente alcohol en el cuerpo y con algo más de albero en los zapatos que el lunes.
Mañana más (o no).